Como ya sabéis es muy importante trabajar la educación emocional. Tras haber puesto en marcha la unidad didáctica de las emociones puse en mi clase el rincón de los sentimientos. Es simple, en el corcho pusimos las emociones estudiadas y las fotos de mis alumnos plastificadas y con bluetac para que la puedan cambiar cada vez que les apetezca. En general no suelo preguntarles por qué están en una emoción u otra a diario pero de vez en cuando sí que hacemos una asamblea en la que hablamos de los cambios de la semana (voy apuntando si alguien se pone en triste o en nervioso).
Cuando veo que alguien está en triste, enfadado o nervioso mucho tiempo le pregunto individualmente qué le pasa o hablamos en clase sobre como se sienten. Y solemos poner en triste a los que están malitos porque cuando estamos enfermos estamos tristones.
Gracias a este rincón he descubierto en mi clase muchos niños que por timidez no contaban que se habían peleado con un amigo o que su papá se había ido a trabajar fuera y por eso estaba triste y muchas cosas más, dejan fluir sus sentimientos sin sentirse juzgados. Me gusta porque de vez en cuando se levantan y cambian su foto de lugar y cuando solucionamos los problemas siempre acaban poniéndose en contento todos y eso me llena de orgullo.
ME HA ENCANTADO ESTE EXPERIMENTO.
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